Índice
- 1 Orientación vocacional al alcance de un clic
- 2 Cómo realizar el test de orientación vocacional: encuentra tu carrera en 4 simples pasos
- 3 Descubriendo tu vocación
- 4 Claves para encontrar tu vocación: descubre tus talentos
- 5 Mitos comunes sobre la vocación
- 6 Señales de haber encontrado tu vocación
- 7 Test vocacional: una herramienta para elegir tu carrera
- 8 ¿Qué es un test vocacional?
- 9 Beneficios de obtener una educación universitaria
- 10 Errores frecuentes al elegir una carrera universitaria
- 11 ¿Cómo elegir la carrera?: La teoría de la decisión
Orientación vocacional al alcance de un clic
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Cómo realizar el test de orientación vocacional: encuentra tu carrera en 4 simples pasos
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Descubriendo tu vocación
En algún momento de la vida, muchos estudiantes de preparatoria se enfrentan a la gran pregunta: “¿Qué camino profesional debo elegir?”. Si sientes una gran frustración por no conocer tus talentos y pasiones, ¡no te preocupes! No estás solo.
Tomar decisiones importantes puede ser agotador, pero no permitas que eso te detenga. Tus pensamientos deben impulsarte hacia el progreso.
Te invitamos a abordar cada cuestión paso a paso, planificar y enfocarte en el presente, sin preocuparte demasiado por el futuro.
La vocación está fuertemente ligada a la personalidad, los gustos, habilidades e intereses. Saber quiénes somos y qué queremos para nuestra vida es fundamental, aunque no siempre sea una tarea fácil, ¿verdad?
Si aún no has descubierto tu vocación, en los siguientes párrafos te brindaremos claves valiosas para adentrarte en el fascinante mundo del autoconocimiento. Este viaje es esencial para desarrollar una visión clara de tu futuro.
¿Qué es la vocación?
Cuando hablamos de la vocación, a menudo no nos detenemos a pensar qué implica este concepto. Sumerjámonos en el camino del autoconocimiento desde el principio.
Entonces… ¿Qué es la vocación?
La palabra vocación viene del término latín vocatio y significa una inspiración divina o una “acción de llamar”.
Podemos relacionar esto con la idea de que la vocación es como una llamada interna que nos impulsa a desarrollar nuestro potencial y habilidades.
Al pensar en la vocación, debemos tener en cuenta muchos aspectos relacionados con nosotros mismos: lo que nos gusta, nuestros intereses, habilidades y personalidad.
Estos aspectos sintetizan y reflejan nuestra identidad única.
La vocación es una inclinación que nos impulsa a dedicarnos a un estilo de vida específico, ya sea en lo personal o en lo profesional. Puede estar relacionada con un trabajo en particular, una carrera universitaria o un oficio.
¿Qué es la vocación profesional?
La vocación profesional va a enlazar nuestras pasiones y destrezas, así como los anhelos de crecimiento personal que tengamos, con un trabajo u ocupación.
Este impulso puede surgir en cualquier etapa de la vida y será el comienzo para que puedas capacitarte en una especialidad en concreto, y de esta manera logres desempeñarte en un ámbito específico relacionado con la profesión.
Algunas personas tienen la claridad desde muy temprana edad sobre la actividad profesional a la que desean dedicarse.
Podría decirse que no eligen su vocación, sino que la vocación los elige a ellos.
Sin embargo, descubrir la vocación propia no siempre es una tarea fácil. Debemos tener en claro quiénes somos y lo que queremos, pero esto puede que no sea el caso para muchas personas.
Además, la vocación es algo que vamos adquiriendo con la experiencia, por lo que se trata de un aprendizaje de toda la vida.
Afortunadamente, existen diversos caminos que podemos tomar para descubrir nuestras pasiones e intereses, así como revelar aptitudes y habilidades que desconocíamos que se encontraban en nuestro interior.
¿Qué son las habilidades?
Las habilidades son las capacidades naturales que nos permiten realizar una actividad de manera efectiva. A diferencia de la vocación, estas se centran en nuestras capacidades para emprender una tarea o actividad, sin tener necesariamente las aptitudes para desarrollarla.
Podemos clasificar las habilidades en dos grandes grupos:
- Habilidades técnicas
Son adquiridas a través de la práctica y no se basan en conceptos teóricos, sino en la experiencia y el entorno laboral en el que nos desenvolvemos.
- Habilidades sociales
Se fundamentan en las relaciones interpersonales y están influenciadas por nuestra personalidad. Muchas de estas habilidades se desarrollan antes de la educación formal, sin necesidad de una formación profesional específica.
Los test de orientación vocacional funcionan como herramientas para evaluar tus intereses y habilidades en diferentes áreas. Las respuestas se agrupan en categorías profesionales que te brindarán una guía para explorar tus opciones.
Claves para encontrar tu vocación: descubre tus talentos
Para iniciar el descubrimiento de nuestra vocación, debemos tener en cuenta ciertos aspectos y plantearnos una serie de interrogantes que debemos responder con total sinceridad.
Podríamos afirmar que encontramos nuestra vocación cuando se cumplen tres elementos relacionados con nuestros deseos y sensaciones más íntimas:
- Exponemos nuestros talentos y pasiones.
- Contribuimos al mundo con una causa que nos preocupe.
- Hallamos un equilibrio entre nuestras aspiraciones y nuestra identidad.
¿Qué implica todo esto? Veámoslo detalladamente a través de estas preguntas.
1. ¿Cómo identificar tus talentos y pasiones?
Si aún no has encontrado tu vocación, es probable que tampoco conozcas tus talentos. Esto es comprensible, ya que el sistema educativo suele enfocarse en disciplinas relacionadas con las matemáticas y la lingüística, dejando de lado otras habilidades.
Para descubrir tus talentos, es importante conocer las diversas habilidades con las que te puedes identificar:
- Habilidades interpersonales o sociales: relacionadas con la empatía y la interacción con otras personas.
- Habilidades intrapersonales: vinculadas a la comunicación contigo mismo.
- Habilidades espaciales o visuales: relacionadas con la capacidad de imaginar y visualizar.
- Habilidades naturistas: conectadas con la forma en que observas el mundo.
- Habilidades cognitivas: asociadas a los procesos mentales y lógicos.
- Habilidades físicas: aquellas que requieren de una coordinación y aptitud específica del cuerpo.
- Habilidades artísticas: ligadas a las capacidades de expresión y destreza a través de las distintas vertientes del arte.
Explorar estas diferentes habilidades te ayudará a identificar tus intereses y aptitudes, y acercarte más a descubrir tu verdadera vocación.
Encontrar la pasión
Una vez que tienes una idea de tus talentos, es crucial llevarlos a la acción y mostrarlos en un contexto que te apasione.
Por ejemplo, supongamos que te gusta la docencia. Ese sería tu talento. Sin embargo, vas a poder desarrollarlo de una u otra manera dependiendo el contexto donde lo expreses.
Si disfrutas enseñar, pero no te sientes a gusto haciéndolo para niños muy pequeños, entonces no serás feliz. En cambio, si te gusta dar clases a adolescentes y tienes la oportunidad de trabajar en la educación media, entonces ¡podrás vivir tu talento con pasión!
Si necesitas ayuda para encontrar tu pasión, una buena idea es embarcarte en un viaje de introspección. De esta manera, podrás conectarte con tus deseos y aspiraciones.
Aquí tienes algunas preguntas interesantes que puedes plantearte:
- ¿Qué actividad estaría dispuesto a realizar sin cobrar un salario?
- ¿Sobre qué temáticas leo mucho sin aburrirme?
- ¿Admiro a alguien? ¿Por qué?
- ¿Existe alguna actividad que me obsesione o no pueda dejar de hacer?
- Si pudiera viajar en el tiempo, ¿cambiaría algo de mi vida?
- ¿Hay alguna temática que me guste enseñar?
- ¿En qué dedico mi tiempo libre?
- ¿Hago alguna tarea en la que el tiempo pase volando?
- ¿En qué momentos me siento creativo?
- ¿Estoy siguiendo mi propio camino o me dejo llevar por la corriente?
A medida que respondas estas preguntas, anótalas en papel y revisa si hay algún patrón o elemento que se repita.
Es probable que tus pasiones emerjan de estas dudas.
Si conoces tus actividades favoritas, pero dudas de si son tus pasiones, puedes utilizar afirmaciones para determinar si estás aprovechando tu talento en esas situaciones.
Puedes considerar que se trata de una pasión si, al realizar esa actividad:
- Sientes que fluye sin esfuerzo.
- Las horas vuelan y pierdes la noción del tiempo.
- No te resulta un esfuerzo.
- Terminas con más energía de la que empezaste.
- Te vuelves un poco más experto cada vez que la llevas a cabo.
Haz la prueba y reflexiona sobre las actividades que te brindan placer o en las que sientes que eres bueno. Si te resulta difícil identificarlas, consulta con personas de confianza y pídeles que compartan qué talentos perciben en ti.
2. Contribuir al mundo
Encontrar nuestra vocación también está relacionado con la idea de contribuir al mundo.
¿Pero qué significa esto?
Como seres humanos, vivimos en sociedad y la mayoría de las personas tienen el deseo de hacer del mundo un lugar mejor. Quieren saber que lo que hacen tiene un propósito y beneficia a otros.
Puedes plantearte algunas preguntas personales como:
¿Cuál es mi propósito en este mundo? ¿Para qué estoy aquí?
Reflexionar sobre lo que realmente te importa y las causas que te conmueven es crucial. Imagina que tienes la oportunidad de mejorar algo en tu comunidad, ¿qué sería? ¿En qué tipo de mundo te gustaría vivir?
En esta etapa, es importante considerar nuestras aspiraciones como un motor que nos impulsa hacia adelante, y el deseo de contribuir como lo que nos anima a seguir adelante.
3. Encontrar el equilibrio entre la identidad y aspiraciones
Otro aspecto fundamental en la búsqueda de nuestra vocación es encontrar un equilibrio entre nuestra identidad y aspiraciones.
Para tener claridad sobre nuestras aspiraciones, es necesario hacernos algunas preguntas:
¿Cómo sería un día ideal en mi vida? ¿Cuántas horas me gustaría trabajar? ¿Cuánto dinero desearía ganar? ¿Cuánto tiempo dedicaría al ocio? ¿Y a la pareja, amigos y familia?
Las respuestas a estos interrogantes nos brindarán una idea de lo que realmente valoramos en la vida.
Mitos comunes sobre la vocación
Ahora que tienes algunas herramientas para explorar tus habilidades, talentos y aspiraciones, es crucial que evites caer en ideas erróneas sobre la vocación.
A continuación, te presentamos algunos mitos sobre este tema para que puedas abordar el proceso de manera empática y respetuosa.
Mito #1: Tenemos una única pasión a lo largo de nuestra vida
Hace unos años era común que las personas trabajaran en una misma empresa hasta su jubilación.
Esto ha llevado a creer que la pasión debe ser única y constante a lo largo de la vida.
Sin embargo, tiene más sentido que realicemos varias actividades a la vez y que algunas se mantengan y otras se abandonen.
Es posible que no se alcance un nivel de excelencia en cada actividad, pero eso no significa que debamos limitarnos a una sola. Simplemente, requerirá más tiempo y esfuerzo llevar adelante múltiples intereses.
Además, las pasiones pueden evolucionar a lo largo del tiempo. Plantearse cambiar de carrera en algún momento no significa que no hayamos encontrado nuestra vocación, sino que esta ha cambiado.
Mito #2: La vocación tiene que ser grandiosa y hacernos ricos
A menudo se piensa que la vocación debe ser algo extraordinario o fuera de lo usual. Algunas personas también creen que debería generar grandes riquezas o destacarse de manera espectacular.
Es crucial deshacernos de esta idea.
La clave para descubrir nuestra vocación radica en alinear nuestras aspiraciones con nuestros talentos y así poder contribuir al mundo.
Todas las actividades tienen un impacto en las personas, y cada vocación, por modesta que parezca, puede marcar la diferencia en la vida de alguien.
No se trata de la magnificencia o la riqueza material, sino de encontrar una actividad que nos haga sentir realizados y nos permita hacer un aporte significativo a los demás.
Mito #3: La vocación se debe encontrar a muy temprana edad
Este mito puede resultar frustrante para muchas personas, ya que no todas descubren su vocación en la juventud.
Encontrar la vocación es un proceso continuo de autoconocimiento que nunca termina.
No te desanimes, concéntrate en experimentar, aprender y desarrollar habilidades que te interesen para comenzar a trazar tu propio camino. No hay límite de edad para descubrir tu vocación, así que mantén una mentalidad abierta y dispuesta a explorar nuevas posibilidades.
Mito #4: La vocación llega a través de una inspiración divina
Otro de los mitos más frecuentes es creer que nacemos con una vocación predeterminada o que llega a nosotros a través de una inspiración divina.
Nada más alejado de la realidad.
Según el concepto del Ikigai, conocemos a través de la acción y no de la idea. Entonces, para saber nuestros gustos y habilidades, primero debemos vivenciarlos y ponerlos en práctica. De esta manera, podemos descubrir opciones que nos interesan y que antes no habíamos considerado.
No esperes que tu vocación se revele mágicamente, busca oportunidades para explorar y probar diferentes caminos. La vocación es un descubrimiento activo y personal que se construye a lo largo de nuestra vida.
Descubre tu Ikigai: ¡encuentra tu razón de vivir!
El Ikigai es un concepto japonés que ayuda a encontrar un propósito de vida y a comprender tus deseos y motivaciones.
Encontrar tu Ikigai es conocerte a ti mismo. Hay que pensarlo como la intersección de 4 círculos o ideas: lo que amas, lo que el mundo necesita, lo que se te da bien y lo que te permite ganar suficiente dinero para vivir.
Si logras encontrar una actividad que combine los 4 aspectos, habrás encontrado tu razón de vivir.
Para descubrir tus aspiraciones o propósitos según el Ikigai, hay 5 pasos que deberías seguir:
- Comienza de forma pequeña
Elige un área de tu vida que necesite atención y construye gradualmente tu propósito de vida. Cada paso cuenta, y lo importante es avanzar constantemente hacia lo que tiene sentido para ti.
- Libérate de viejas ideas
Reflexiona sobre tus necesidades y determina si provienen de tu interior o de influencias externas. Deshazte de ideas que no estén alineadas con lo que realmente quieres en la vida.
- Encuentra armonía y sustentabilidad
No se trata solo de descubrir un propósito que te brinde satisfacción, sino de asegurarte de que sea armonioso y sostenible a largo plazo.
- Disfruta de las pequeñas cosas
No condiciones tu felicidad solo a grandes logros. Aprende a encontrar alegría en los pequeños momentos y celebra los logros en el camino hacia tu propósito.
- Vive en el presente
No te enfoques únicamente en la meta final, disfruta el viaje hacia ella. Aprende a estar satisfecho con el presente y evita buscar constantemente algo más.
El concepto de Ikigai va más allá de encontrar una única pasión o profesión. Es un enfoque holístico que busca armonizar los aspectos personales, sociales y profesionales de nuestra vida.
Esta filosofía de vida también enfatiza la importancia de cultivar una mentalidad de crecimiento y aprendizaje continuo. No se trata solo de descubrir tu propósito, sino de seguir evolucionando y mejorando en tu camino. Es un proceso dinámico que puede cambiar a medida que adquieres nuevas experiencias y conocimientos.
Además, te permite explorar diferentes áreas que te apasionen a lo largo de tu vida. Puedes tener múltiples Ikigai y adaptarte a los cambios que surjan en tu búsqueda de propósito.
En resumen, el Ikigai te invita a encontrar una actividad que combine tus pasiones, habilidades, tu contribución al mundo y el sustento económico.
Manteniendo una mentalidad de crecimiento y adaptándote a los cambios, podrás encontrar un equilibrio y sentido en tu vida.
Señales de haber encontrado tu vocación
En el emocionante camino del autodescubrimiento, es natural que encuentres actividades que te atraigan.
Aquí te presentamos algunas señales que te ayudarán a identificar si has encontrado tu vocación. Estas pistas te brindarán una mejor comprensión y te guiarán hacia tu propósito.
El tiempo vuela
Si te sumerges en una actividad y pierdes la noción del tiempo, experimentando una profunda concentración, es un indicio a tener en cuenta. Este fluir podría estar relacionado con tu vocación.
Facilidad para aprender
Si en tus nuevas experiencias notas que tienes facilidad para aprender sobre esa área, es muy probable que estés involucrado en algo que realmente te guste y lo asimiles sin dificultades. Presta atención a esto porque ¡podría ser una clave sobre tus pasiones!
Identificación con un rol
En nuestra sociedad desempeñamos diversos roles según el contexto en el que nos encontramos. Estos se pueden dar a partir de las profesiones o de las aspiraciones personales.
Otro indicador de tu vocación podría ser si te identificas más con un rol que no se alinea con lo que has estudiado formalmente.
Por ejemplo, puede ser que hayas estudiado una carrera como Abogacía, pero también te apasiona escribir y has publicado artículos. Entonces, cuando te presentas a alguien que no te conoce lo haces como “escritor” en vez de como “abogado”.
Deseo de aprender
Cuando te apasiona un tema, sientes un deseo innato de profundizar en él. Si te encuentras investigando por tu cuenta, leyendo artículos y buscando información en diferentes fuentes sobre una disciplina en particular, es posible que estés frente a una pasión que podría convertirse en tu vocación.
Trabajo y el disfrute combinados
Por otro lado, te puede pasar de estar en un trabajo que te gusta y no experimentar esa sensación de desgano los domingos por la noche. Eso se puede considerar como una señal clara de que la vocación ha llamado a tu puerta.
La capacidad de disfrutar de las actividades diarias es el indicio máximo de haber encontrado tu vocación.
Recuerda que estas señales son guías en tu búsqueda, y que el camino hacia la vocación es único para cada persona. Explora, experimenta y mantén una mente abierta.
Test vocacional: una herramienta para elegir tu carrera
Como hemos visto anteriormente, nuestra vocación y habilidades desempeñan un papel fundamental en nuestra elección de carrera, ya que nos brindan la motivación necesaria para continuar estudiando.
Una vez que hayas realizado el proceso de autoconocimiento y tengas claridad sobre tus intereses y aptitudes, estarás en una mejor posición para buscar tu profesión de manera consciente.
El test vocacional se convierte en una herramienta invaluable para explorar tus posibilidades y tomar decisiones informadas.
Este tipo de evaluación te ayudará a identificar áreas de estudio y profesiones que se alineen con tus fortalezas y preferencias.
¿Qué es un test vocacional?
Un test vocacional es una valiosa herramienta orientadora que te permite evaluar tus habilidades, intereses y preferencias, brindándote sugerencias sobre las posibles carreras que podrían ser más adecuadas para tu perfil.
Los profesionales especializados en orientación vocacional, utilizando principios de psicología, son quienes te guiarán en este proceso de elección. Su objetivo es ayudarte a encontrar una carrera que se ajuste mejor a tu subjetividad y características personales.
Los tests vocacionales online pueden servir como una herramienta de aproximación a tus intereses y dudas en relación con una carrera universitaria. También te ayudan a definir tu perfil profesional.
Es importante destacar que el test vocacional es un recurso complementario que brinda información inicial, pero requiere del acompañamiento de entrevistas, talleres y charlas vocacionales para que puedas explorar en mayor profundidad tus preferencias y opciones.
La elección de una carrera es una decisión compleja y se ven involucrados nuestros sentimientos, sueños, aspiraciones y fantasías. Sin embargo, también debemos tener en cuenta factores externos como la realidad laboral del profesional, la situación económica del país y la oferta de trabajo.
Diferencias entre vocación, profesión y trabajo: consejos de una experta en orientación vocacional
Cuando se trata de elegir una carrera universitaria, cada persona tiene su propio proceso de toma de decisiones. Es fundamental tener en cuenta las cuestiones personales que influyen en esta elección, ya que todos somos únicos.
Marcela Sotelo es una psicóloga clínica certificada en orientación vocacional, con años de experiencia guiando a estudiantes, que nos brindará una visión detallada sobre la vocación, la carrera y el trabajo.
Además, comparte algunos errores comunes que los alumnos pueden cometer al elegir su carrera profesional.
A continuación, le cedemos la palabra a Marcela, quien nos ayudará a entender mejor estas diferencias fundamentales:
Orientación vocacional en primera persona: tomando decisiones con confianza
¡Hola! Si estás aquí, es probable que tengas algunas dudas sobre qué estudiar. Tal vez estás considerando más de una opción y te sientes presionado por tus padres, la escuela, el tiempo, entre otros.
Es normal tener muchas cosas en la cabeza que nos generen dudas. Permíteme decirte que esto es completamente normal. A mucha gente le ocurre que, al momento de decidir, surgen dudas sobre qué hacer y hacia dónde dirigirse.
Comencemos con una pregunta: ¿Es importante tomar la decisión de elegir una carrera? ¿Qué piensas al respecto? En mi opinión, decidir qué carrera estudiar es un paso significativo y existen factores tanto externos como internos que nos guían en esa elección.
Los factores externos son aquellos que mencioné antes, la presión de los demás, como nuestros padres, familiares, amigos y maestros. Mientras tanto, los factores internos tienen que ver con tus gustos, fortalezas, habilidades y cómo te visualizas en el futuro.
¡Atención! Todos deberíamos dar mayor importancia a los factores internos, pero a menudo los externos son los que más nos bombardean. Por lo tanto, es crucial cuidar esta parte.
Definitivamente, elegir una carrera es fundamental, pero ¿es una cuestión de vida o muerte? Tómate un momento para reflexionar y te daré mi respuesta.
No lo es.
Decidir una carrera no es una cuestión de vida o muerte. Entiendo que a veces pueda sentirse así, que lleguemos a creer que esta decisión determinará el éxito o el fracaso de por vida, pero no es así.
Quiero ayudarte a liberarte de la presión de pensar que elegir una carrera es una cuestión de vida o muerte, incluso si nos lo han dicho una y otra vez. No lo es.
Hablemos de una realidad: es muy común que las personas cambien de profesión en algún momento de sus vidas.
En México, aproximadamente el 40% de las personas admiten haberse equivocado en su elección de carrera o no sentirse satisfechas con la decisión que tomaron. Esto significa que 4 de cada 10 personas enfrentan esta situación.
Sin embargo, no podemos afirmar que aquellos que han tomado una decisión equivocada en su carrera están condenados a una vida insatisfactoria o al fracaso.
Es importante comprender que todos estamos en constante crecimiento y evolución. Nuestras experiencias y conocimientos cambian con el tiempo, lo que puede llevarnos a reevaluar nuestras elecciones profesionales. Es perfectamente normal descubrir que nuestros intereses y pasiones evolucionan a lo largo de nuestra vida.
Etapas en la vida del estudiante
Desde que nacemos y durante nuestra infancia, comenzamos a aprender en la escuela y a descubrir nuestras habilidades y preferencias. A medida que nos acercamos a la adolescencia, llega un momento en el que debemos tomar decisiones específicas sobre nuestra educación y futura carrera profesional.
Elegir una carrera marca un punto de inflexión en nuestras vidas, donde sentimos que todos los ojos están puestos en nosotros, lo cual puede generar estrés, desesperación e incertidumbre.
Cuando éramos niños, generalmente nuestros padres o familiares tomaban decisiones por nosotros. Sin embargo, en este tema en particular, la decisión debe ser personal.
A menudo, no contamos con todas las herramientas necesarias para tomar esta decisión de manera adecuada, y terminamos basándonos más en factores externos que en nuestros propios intereses internos.
Es importante recalcar que los factores internos son los más relevantes y constituyen la clave para tomar una decisión de carrera más acertada. Al final del día, debemos comprender que una carrera es una herramienta, y esto es algo fundamental.
Una carrera no define quiénes somos, pero sí nos brinda oportunidades al proporcionarnos conocimientos, técnicas y herramientas para explorar diversas áreas de estudio.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que una carrera no garantiza automáticamente la riqueza económica, uno de los temores más comunes. Es natural querer una carrera que nos apasione y nos haga felices, pero también buscamos un buen desempeño económico, ya que necesitamos trabajar y tener nuestros propios recursos.
Es crucial comprender que el objetivo principal al elegir una carrera no debe ser buscar garantías de riqueza económica. Pensar de esa manera puede ser una señal de advertencia.
Ninguna carrera puede asegurarte automáticamente el éxito financiero; eso depende de tus propias acciones y esfuerzos.
Una carrera es simplemente una herramienta, y cómo la utilices y aproveches dependerá completamente de ti.
Es usual confundir y mezclar tres conceptos relacionados: vocación, carrera y trabajo. Durante el proceso de elección de carrera, es probable que muchas personas te pregunten: “¿Cuál es tu vocación?” En este punto, te invito a usar tu imaginación al máximo para explicar estos tres conceptos.
La vocación
Quiero que te imagines que la vocación es como el mundo.
¿Qué quiere decir esto?
Que la vocación es lo que nos va a abrir todo el panorama de lo que podemos hacer. Esta analogía es una forma interesante de visualizar la amplitud y diversidad de posibilidades
Si nos pusiéramos a reflexionar, ¿tú crees que podríamos explorar el mundo en un día? No. ¿En un mes o en un año?, tampoco. ¿Por qué? Porque el mundo nos ofrece muchas posibilidades.
Al igual que el mundo ofrece diferentes países, culturas y ecosistemas para explorar, la vocación nos abre un panorama de opciones y nos permite descubrir nuestras fortalezas, habilidades, gustos y personalidades.
Es importante entender que no nacemos destinados para una única cosa en la vida. En cambio, somos seres únicos con una combinación única de características, experiencias y talentos. Cada persona tiene la capacidad de destacar en múltiples áreas y tiene intereses diversos.
Puedes ser bueno en varias cosas y tener intereses en diferentes ámbitos. La vocación no se limita a una única carrera específica.
La vocación abarca todas esas áreas en las que te sientes competente y disfrutas. Puedes tener la vocación de enseñar, pero eso no significa que debas estudiar únicamente para ser docente.
Puedes seguir cualquier carrera y aun así ejercer tu vocación de enseñanza de diversas formas, como dar conferencias, escribir libros, interactuar con personas en el ámbito de la psicología, entre otros.
Además, a través de nuestra vocación tratamos de dejar una huella en el mundo y beneficiar a los demás.
La forma en que impactas y dejas tu huella puede variar según tus intereses y habilidades. Puedes inspirar a otros a través de diferentes medios y campos, como la medicina, la psicología, la ingeniería o el derecho.
La vocación es más amplia que una sola carrera y te brinda la libertad de elegir cómo deseas dejar tu marca en el mundo.
Entonces, no hay solo una manera de hacer las cosas. Nos tenemos que quedar con la idea de que la vocación nos abre un mundo de posibilidades, de lo que podemos hacer con nuestras vidas.
La carrera
¿Qué es la carrera? La carrera viene a ser como un país dentro de ese mundo. Es el área de estudio. Al igual que un país tiene diferentes estados, ciudades y culturas, una carrera tiene diversas especialidades y enfoques que puedes explorar.
Pensemos juntos, voy a poner de ejemplo mi carrera. La Psicología es como si fuera un país, allá adentro también hay muchas posibilidades, a lo mejor no tantas, como las del mundo, pero hay muchas opciones.
Si te hiciera la misma pregunta, podríamos recorrer un país como México en un día, en un mes, o en un año, quién sabe. A lo mejor muy superficialmente, porque un país tiene estados o provincias, tiene ciudades, tiene distintas culturas.
Entonces una carrera es como un país, porque adentro de ella hay muchas opciones. Estudiando Psicología es como si yo entrara a ese país, pero allá adentro está Psicología Clínica, Psicología Infantil, Psicología Organizacional, etc.
A lo mejor me interesa trabajar con terapia de pareja, con la orientación vocacional o me quiero ir a rehabilitación de adicciones. Estamos hablando de que todos los ejemplos que te estoy dando son psicólogos, pero cada uno está en áreas diferentes.
Algo importante que también nos han hecho creer de la carrera, es que tienes que quedarte en una sola opción y trabajar en esa profesión para considerar que ya la hiciste en la vida, que eres exitoso o exitosa, pues ¿quién dijo eso?
En el mundo real, una carrera es como si tú entraras a ese país y ahí puedes explorar todo lo que hay dentro. Sin embargo, tú también puedes decidir irte a otro país, irte a otro lugar a explorar.
Acuérdate que la vocación es todo el panorama, todo lo que hay. En el mundo real no hay muros o algo que te impida irte a otra área.
Es fundamental tener en cuenta que no estás limitado a una sola área dentro de tu carrera.
Puedes elegir explorar diferentes especialidades o incluso combinar tu conocimiento en una disciplina con otras áreas de interés. Por ejemplo, si estudiaste Psicología, pero también te interesa la Mercadotecnia, puedes buscar oportunidades para combinar ambos campos, como con la psicología del consumidor.
No estás obligado a quedarte en una sola carrera o profesión para considerarte exitoso. Tienes la libertad de seguir explorando y expandiendo tus horizontes profesionales.
Puedes decidir aventurarte en otros “países” o áreas de estudio, ya sea a través de programas de posgrado, diplomados, experiencias laborales o incluso fusionando diferentes disciplinas.
La clave está en seguir descubriendo y desarrollándote en áreas que te interesen y que formen parte de quién eres como persona.
Como te digo, en el mundo real tú puedes estudiar una carrera, pero al momento de ejercerla puedes combinarla con otras cosas que te gustan, otros temas que te llaman la atención o simplemente algo que no tiene nada que ver, pero forma parte de quién eres.
El trabajo
¿Qué crees que sea el trabajo? Lo más común es pensar que el trabajo es una ciudad y entiendo, porque es lo más lógico decir de más grande a más pequeño. Pero el trabajo es el camino.
El trabajo es el camino que cada persona va recorriendo a lo largo de su vida profesional. Es importante entender que el trabajo no se limita a una única experiencia laboral, sino que es un proceso continuo de desarrollo y crecimiento.
En ocasiones, hay personas afortunadas que encuentran su primer trabajo y lo disfrutan tanto que permanecen en él durante muchos años.
Sin embargo, la mayoría de las personas ingresan a un trabajo relacionado con su carrera inicialmente, pero con el tiempo buscan nuevas oportunidades y desafíos. Este proceso de búsqueda y exploración es lo que define el trabajo como el camino personal de cada individuo.
Cuando reflexionamos sobre nuestro futuro laboral, podemos basar nuestras decisiones en diferentes enfoques.
- Opción A: creer en la vocación y en la huella que queremos dejar en el mundo.
- Opción B: investigar las opciones de carreras disponibles y seleccionar las que más nos gustan.
- Opción C: reflexionar sobre el tipo de trabajo al que deseamos dedicarnos y las metas que queremos alcanzar.
No sé qué opinas tú, pero la gran mayoría de las personas empieza por la C.
Es decir, considerando aspectos como el salario y la dirección en la que desean enfocar su trabajo. Si bien el dinero es importante, si nuestras decisiones se basan únicamente en ese factor, podemos limitar nuestras posibilidades y no ver el panorama completo.
Acuérdate que el trabajo es el camino. Esto implica que a medida que avanzamos en nuestra vida profesional, tenemos la oportunidad de descubrir nuevas posibilidades y explorar diferentes áreas.
Algunas veces, nos encontramos en trabajos que se asemejan a lo que ya hemos hecho anteriormente, pero podríamos estar perdiendo oportunidades más grandes y enriquecedoras.
Cómo decidir tu carrera
A todo esto, probablemente te estás preguntando: “OK Marcela, ¿y qué se necesita para decidir carrera? ¿Qué puedo hacer para decidir mejor?” Aquí te dejo algunas recomendaciones:
- Conócete a ti mismo. Realiza un proceso de autoconocimiento para entender tus fortalezas, habilidades e intereses. Pregúntate qué te apasiona, en qué áreas destacas y qué actividades disfrutas. Reflexiona sobre quién eres como persona y qué valores son importantes para ti. Esto te ayudará a identificar las carreras que se alinean con tu perfil.
- Haz pruebas de intereses vocacionales y de personalidad. Estas pruebas suelen ser un complemento valioso en tu proceso de decisión. Un test vocacional puede proporcionarte orientación y ayudarte a explorar campos y carreras que se ajusten a tus preferencias. Busca profesionales o servicios de orientación vocacional que ofrezcan este tipo de examen.
- Experiencia práctica. Si es posible, busca oportunidades para tener experiencias prácticas en los campos que te interesan. Esto puede incluir pasantías, prácticas profesionales, trabajo voluntario o incluso conversaciones informativas con profesionales que ya estén trabajando en esas áreas. Obtener una visión de primera mano te permitirá evaluar si la realidad de la carrera coincide con tus expectativas.
- Investiga a fondo las carreras: Es fundamental que obtengas un conocimiento profundo sobre las carreras que te interesan. Examina los planes de estudio de las universidades y conoce los campos laborales asociados a cada carrera. Ten en cuenta que estas descripciones pueden ser generales y no abarcar todas las posibilidades. Investiga más allá y conversa con personas que admires y que estén haciendo cosas que te llamen la atención para obtener una visión más amplia del mundo real de las carreras.
Te pongo el ejemplo de la carrera que yo estudié, Psicología. En papel dice que puedes poner tu consultorio o trabajar para empresas, hospitales, de la mano con maestros o con otros profesionales.
Pero no dice que puedes hacer tu canal de YouTube y hablar de cuestiones como la orientación vocacional. Sin embargo, esto es lo que yo hago.
Le agradecemos a Marcela por sus palabras. Si quieres ver el webinar completo de ella, puedes acceder desde este enlace.
Beneficios de obtener una educación universitaria
¿Ya realizaste nuestro test vocacional, pero aún no sabes si quieres estudiar? Seguir una carrera universitaria puede brindarnos numerosos beneficios y abrirnos a diversas oportunidades.
A continuación, destacaremos algunas de las ventajas más importantes de obtener una educación universitaria:
Especialización y pasión
Uno de los principales beneficios de estudiar en la universidad es la posibilidad de especializarnos en el área que nos apasiona. La dedicación y esfuerzo que invertimos en conseguir nuestro título nos permite convertirnos en expertos en nuestro campo de interés.
Salida laboral
En general, una carrera universitaria brinda mayores oportunidades de empleo en comparación con aquellos que solo tienen el bachillerato. Aunque no es imprescindible contar con un título universitario para trabajar en lo que nos gusta, tener una formación académica superior puede aumentar nuestras posibilidades de obtener empleos más competitivos y disfrutar de mejores condiciones laborales.
Independencia personal y económica
Continuar con estudios universitarios nos otorga la oportunidad de lograr nuestra propia independencia, tanto a nivel personal como económico. La universidad nos brinda herramientas para desarrollarnos como individuos y nos prepara para enfrentar los desafíos del mundo laboral de manera más efectiva.
Visión crítica y profesionalismo
La educación universitaria fomenta el desarrollo de una visión crítica del mundo y de nuestra profesión. Nos capacita para analizar situaciones desde diferentes perspectivas y nos ayuda a adquirir habilidades de pensamiento crítico y resolución de problemas.
Es recomendable realizar un test vocacional para anticiparnos y evaluar los aspectos positivos y negativos de la carrera universitaria que estamos considerando. De esta manera, reducimos las posibilidades de enfrentar crisis o dudas en relación con nuestra vocación o con las diversas perspectivas laborales.
Desafíos comunes al elegir qué estudiar
Cuando terminamos el bachillerato, es normal pensar que podemos encontrar la carrera perfecta de inmediato, pero la realidad es que cada persona tiene un proceso único. No todos los casos son iguales.
Existen quienes ya sienten una vocación desde muy temprana edad, incluso antes de terminar la preparatoria. Pero, ¿qué pasa si no me gusta nada? ¿Cómo puedo elegir una carrera en ese caso?
Al momento de tomar la decisión sobre qué estudiar, es común que nos surjan muchas dudas. Algunas de las más frecuentes incluyen:
- ¿Debo elegir mi carrera basándome en las materias que más disfruté en la preparatoria?
- ¿Es posible trabajar y estudiar al mismo tiempo?
- ¿Cómo me aseguro de haber tomado una buena decisión y no estar perdiendo el tiempo?
Veamos más detenidamente cada una de estas dudas para brindarte mayor claridad.
Elegir según las asignaturas favoritas
Cuando no estamos seguros de nuestras habilidades y preferencias, es tentador elegir una carrera basándonos en las asignaturas escolares en las que destacamos o en las que obtuvimos mejores calificaciones.
Aunque esto puede ser un indicio de hacia dónde dirigirnos, no siempre es lo más apropiado.
Un test vocacional para carreras universitarias nos proporcionará opciones que se ajusten a nuestro perfil y nos abrirá otras alternativas que tal vez no hayamos considerado.
Indecisión entre trabajar o ingresar a la universidad
Otro dilema que puede surgir al finalizar el bachillerato está relacionado con las necesidades económicas de los estudiantes. Muchas personas optan por comenzar a trabajar y posponer el inicio de los estudios universitarios.
Si te encuentras en esta situación, el test vocacional gratuito de CursosyCarreras puede ayudarte a comprender si es posible combinar el trabajo con una carrera universitaria o si la opción más adecuada es enfocarse en los estudios académicos.
Miedo a perder tiempo
El último conflicto que genera incertidumbre en los jóvenes es el temor a perder tiempo. Muchos estudiantes no desean invertir tiempo en una carrera que sospechan no les gustará o que resultará diferente a lo esperado.
Es normal no querer sentirse frustrados después de cursar uno o más años y decidir cambiar de carrera, ni desilusionarse al descubrir que una carrera no cumple con sus expectativas.
Una buena orientación vocacional que incluya pruebas, puede prevenir que los estudiantes pierdan tiempo cambiando de profesión o se desmotiven cuando comiencen a estudiarla.
Errores frecuentes al elegir una carrera universitaria
Al tomar la decisión de qué carrera universitaria estudiar, es crucial realizar una investigación exhaustiva.
En esta etapa, debemos investigar diversas cuestiones, como las características de la universidad, el plan de estudios de la carrera, las oportunidades laborales disponibles y los salarios promedio de los graduados.
Los futuros estudiantes también pueden obtener información directamente de las universidades a través de charlas informativas y orientaciones vocacionales, ya sea en grupos o de forma personalizada.
El ingreso a la universidad puede parecer complicado, pero no tiene por qué ser así.
A continuación, te presentamos los errores más frecuentes que suelen cometer los jóvenes al elegir una carrera, para que puedas evitarlos:
No investigar en profundidad
Muchos estudiantes eligen una carrera sin conocer a fondo de qué trata, qué asignaturas se estudiarán o cuáles son las posibilidades laborales. Es importante investigar con anticipación y tener suficiente tiempo para conocer bien las profesiones y compararlas.
¿Cómo iniciar este proceso?
Puedes encontrar mucha información en internet y utilizar herramientas como CursosyCarreras.mx para buscar, filtrar y comparar diferentes opciones académicas según tus preferencias.
También tienes la posibilidad de consultar con las opciones que más te interesen y responder tus consultas al instante.
No conocerse a uno mismo
Si no tienes claridad sobre tu futuro, tus fortalezas, habilidades, gustos y preferencias, es difícil tomar una buena decisión de carrera.
Conocerte a ti mismo es un proceso continuo y complejo, pero es fundamental tener una base de tu perfil, entender tus intereses, definir qué significa el éxito para ti y qué estás buscando en este momento, ya que eso te ayudará a tomar una mejor decisión.
Dar demasiada importancia a las opiniones de los demás
Es común que algunas personas tengan una idea clara de lo que quieren estudiar, pero sientan temor a la crítica o presión de la familia. Recuerda que la persona que vivirá el resto de su vida con esa decisión eres tú.
No bases tu elección en lo que los demás te dicen o en el miedo a la crítica. Es mejor fundamentar tu decisión en analizar lo que te hace feliz.
Pensar solo en el dinero
Evita elegir una carrera solo por el salario que ofrece. Algunas profesiones bien remuneradas atraen a muchos estudiantes, pero debes recordar que hay personas que estudiaron esas carreras y no les gustan o no ganan el sueldo esperado. Considera tus intereses y pasiones, no te limites solo a las opciones más lucrativas.
Falta de motivación o un propósito claro para estudiar
Muchos estudiantes pasan de un nivel educativo a otro solo por “hacer algo” o para ocupar su tiempo, sin cuestionarse si realmente desean obtener un título universitario o si prefieren seguir otro camino en la vida.
Es fundamental tener un motivo sólido para estudiar y un proyecto de vida claro que nos brinde gratificación y significado.
En resumen, para tomar la mejor decisión sobre nuestra futura carrera universitaria, es importante considerar nuestros intereses y atracciones.
Además, es elemental establecer un proyecto de vida claro que nos motive a formarnos como profesionales en la universidad y que sea gratificante y significativo.
La carrera que elijamos tendrá un impacto en nuestra identidad, por lo que debemos sentirnos identificados con ella y percibir que es la dirección adecuada para nosotros.
¿Cómo elegir la carrera?: La teoría de la decisión
A lo largo de este artículo hemos explorado varios factores a tener en cuenta al momento de elegir una carrera universitaria y de realizar un test vocacional. Pero, ¿qué hacemos después de analizar todos estos aspectos?
¡Tomar una decisión!
La teoría de la decisión es un área de estudio que busca comprender y analizar los procesos de toma de decisiones humanas. Se enmarca dentro de disciplinas como la administración, la psicología y la economía, y se ocupa de examinar cómo las personas eligen entre diferentes alternativas en situaciones de incertidumbre.
Desde esta teoría, podemos entender cómo las personas toman decisiones según su racionalidad, información y capacidad para evaluar las consecuencias de sus elecciones.
Es utilizada por miles de empresas y personas alrededor del mundo para elegir entre varias alternativas que compiten entre sí.
En este caso podrá ayudarte a elegir la casa de estudios que cumpla mejor con tus propios objetivos y necesidades.
¿Cómo puedes priorizar tus opciones?
Paso 1: Identificar las opciones
En primer lugar, debes identificar las diferentes carreras universitarias que te interesan. Puedes hacer una lista de las opciones disponibles y considerar aquellas que se alineen con tus intereses y habilidades.
Paso 2: Definir los criterios de decisión
Luego, debes establecer los criterios que utilizarás para evaluar y comparar las diferentes opciones. Estos criterios pueden incluir factores como el campo laboral, las oportunidades de crecimiento, el salario, la satisfacción personal, la duración de los estudios, entre otros.
Paso 3: Recopilar información
A continuación, debes recopilar información relevante sobre cada una de las carreras que estás considerando. Esto puede incluir investigar los planes de estudio, las universidades, las perspectivas laborales, las experiencias de estudiantes y profesionales en esos campos, entre otros datos.
Paso 4: Evaluar y ponderar los criterios
Una vez que tienes la información, debes evaluar cada carrera en función de los criterios establecidos. Asigna una puntuación a cada criterio según su importancia para ti. Por ejemplo, si la empleabilidad es una prioridad para ti, puedes asignarle un mayor peso en tu evaluación.
Paso 5: Realizar un análisis comparativo
Una vez que hayas establecido los criterios y las puntuaciones, es momento de comparar las diferentes carreras. Puedes emplear la herramienta de matriz de decisión, que te servirá para comparar diferentes opciones basándonos en varios criterios o factores.
Al final, sumas las puntuaciones para obtener una visión general de cuál opción se ajusta mejor a tus necesidades y preferencias.
Paso 6: Tomar la decisión
Basándote en los resultados del análisis comparativo, elige la carrera universitaria que mejor se ajuste a tus necesidades y preferencias. Ten en cuenta que esta decisión es personal y debe ser coherente con tus objetivos a largo plazo y tus valores.
Si quieres ver un ejemplo concreto para aplicar la toma de decisiones, te recomendamos descargar nuestro eBook gratuito “Claves para elegir universidad”. Allí encontrarás de forma clara un modelo para elegir una casa de estudios según diversos atributos.
¡Aprovecha todas las herramientas disponibles!
¿Después de realizar el test vocacional aún no puedes definir tu carrera universitaria? No te preocupes, quedan otros recursos que puedes explorar para tomar una decisión informada.
Aquí te presentamos algunas opciones adicionales que pueden brindarte más información y orientación en tu proceso de elección de carrera:
- Busca la ayuda de un especialista en Psicología: un profesional especializado en orientación vocacional puede brindarte un apoyo personalizado. Con su experiencia y conocimientos, podrán guiarte y proporcionarte herramientas específicas para explorar tus intereses, habilidades y objetivos profesionales.
- Reflexiona y juega un poco: aunque no sepas exactamente qué te gustaría hacer, seguramente tienes una idea clara de lo que no te gusta. Tómate un tiempo para reflexionar y haz una lista de tus pasatiempos y hobbies favoritos, ya que pueden revelar pistas sobre tus áreas de interés. Continúa investigando hasta encontrar lo que realmente te apasiona.
Además de estas sugerencias, existen otras acciones que puedes tomar para ampliar tus horizontes y obtener más información sobre las opciones de carrera. Considera las siguientes ideas:
- Libros y guías sobre orientación vocacional: consulta por recomendaciones de libros que abordan el tema de la orientación y elección de carrera. Estas lecturas pueden proporcionarte perspectivas únicas y consejos prácticos para ayudarte a encontrar tu camino profesional. Explora también reseñas de guías prácticas que te orienten en el proceso de toma de decisiones y listas de lecturas recomendadas para profundizar en la temática.
- Organizaciones y servicios de asesoría vocacional: puedes buscar información sobre instituciones y organizaciones especializadas en orientación vocacional. Estas entidades ofrecen servicios de asesoramiento profesional y orientación educativa. Podrás obtener programas y recursos específicos, como talleres, evaluaciones o asesoramiento individualizado, que te ayudarán a explorar tus opciones y tomar decisiones informadas.
- Programas de mentoría y coaching: explora diversos programas diseñados para la orientación vocacional. Un mentor o coach experimentado en el ámbito educativo puede proporcionarte apoyo, guía y consejos prácticos durante todo el proceso de elección de carrera. Aprovecha los beneficios de contar con la experiencia y el conocimiento de alguien que ha recorrido el camino antes que tú.
- Eventos y ferias educativas: mantente informado sobre las ferias educativas y eventos relacionados con la orientación vocacional. Estos espacios brindan la oportunidad de interactuar directamente con instituciones educativas, expertos en el campo educativo y profesionales de diferentes carreras. Podrás obtener información valiosa, asistir a conferencias y charlas temáticas, así como descubrir opciones educativas que se ajusten a tus intereses y objetivos.
Para finalizar…
A lo largo de este artículo, hemos destacado la importancia del autoconocimiento para identificar tus talentos, habilidades y aspiraciones, y así poder visualizar tu futuro. Dedicar tiempo a esta etapa es fundamental para aprender más sobre ti mismo.
Utiliza las herramientas que te hemos proporcionado para asegurarte de elegir la carrera adecuada para ti.
Recuerda que tomar una decisión sobre tu carrera es un proceso que requiere reflexión y responsabilidad. Tómate el tiempo necesario para evaluar todas las opciones y asegurarte de elegir a conciencia.
Una vez que hayas transitado el proceso de autoconocimiento, es importante pasar a la acción y aprovechar las oportunidades que se te presenten. La experiencia y la práctica diaria te brindarán la base necesaria para descubrir tus preferencias, validar tus decisiones y encontrar tu verdadera vocación.
Si aún te encuentras lejos de tu vocación, ¡no desesperes! Trata de pensar si en este momento estás trabajando realmente para conocer tus propósitos. Pregúntate qué lecciones puedes aprender de la situación y, si tienes dudas, ¡pide ayuda! Todas las personas han pasado por experiencias similares en algún momento de sus vidas.
Desde CursosyCarreras te deseamos el mayor de los éxitos en tu camino hacia una carrera satisfactoria y significativa. ¡Esperamos que nuestro test vocacional, EduMatch te ayude a confiar ti mismo y perseguir tus sueños!